Una Lima provinciana: Cono Norte
Decir cholo ya no es una palabra despectiva. Y es que ellos lo aceptan con orgullo y no aparentan ser lo que no son. Los papeles se cambiaron. Aquellos provincianos que llegaron un día para salir adelante en la capital, ahora han progresado. Los culpables de que Lima sea un crisol de razas y culturas ya no tienen nada que envidiar. Aquella gente que un día vendió chicles y cigarrillos en las calles, tienen casas de dos, tres a cuatro pisos. Carros del año. Y dirigen su propia empresa. Mas aún ninguno olvida su pasado.Es curioso saber que hoy día, los centros comerciales de mayor movimiento, los centros de recreación más modernos y, en general, el polo de atracción más dinámico de inversiones en Lima es lo que se conoce como el Cono Norte, cronológicamente el primer destino urbanístico de la fuerte migración provinciana que ha hecho posible la nueva Lima.De lunes a viernes trabajo y mucho esfuerzo. Sin embargo al llegar domingo diversión y relax. Algo que se puede apreciar aquí son las yunsas: expresión característica de los provincianos. Una de las más coloridas y festivas celebraciones populares de muy rápida asimilación en todo el país. Sólo unas décadas atrás y al parecer con las primeras carreteras llegó a la capital. Gente que se ve muy contenta danzan al son de las bandas.Pachamancas y cuyadas. También se vende el infaltable caldo de gallina. Y es que no se necesita de un restaurant. Basta con una carretilla y una banca para vender hasta las seis de la mañana y degustar ese sabroso plato, como le llaman levanta muerto. Ni que decir de las polladas. Aquí se puede observar la parte VIP y la parte popular. Es decir algo “alimeñado”.La famosa música vernacular y la chicha son bien recibidas. Aquella música ya no es más que una expresión andina, sino limeña. Conciertos donde se espera a los cantantes más o menos conocidos en los medios. Desde un recordado Chacalón hasta una pequeña Muñequita Sally han pasado por el escenario de aquellos distritos. No obstante, con el pasar de los años la technocumbia ha invadido los conos. Basta con mirar en cualquier poste para observar carteles muy coloridos con nombres de sus cantantes favoritos. Las discotecas son un punto de encuentro muy particular. Allí donde la fusión de música, hace bailar a cientos de personas con “perreo chacalonero.”Pasadas cinco décadas, todo evolucionó. Su gente, costumbres, comida, y su tierra.